Una excursión nos llevó el viernes a Fisterra. En la edad media este cabo significaba el fin del mundo, se imaginaban que después del horizonte terminaría nuestro mundo. Hoy sabemos que allí nos espera la inmensidad del continente americano y luego Asia si seguimos navegando por este mar que parece interminable.
Salir, viajar, conocer nuevos mundos, encontrarse con otras culturas, echar nuevas raíces o volver … una historia que vivieron y viven muchos gallegos. Por eso elegimos el monumento al emigrante que está en el puerto de Fisterra como símbolo para este artículo.
Si vais allí, contadnos vuestras experiencias. Esperamos vuestros comentarios.